Bien, hace tiempo que no cuento una historieta del trabajo (una de las principales razones de la creación de este blog) Ahí va:
Los suicidios son más habituales de lo que la gente cree (recogemos un par a la semana y mi ciudad es de apenas 400.000 habitantes) Pero está comprobado que hablar de los suicidios provoca más suicidios, así que no abusaré del tema.
Aquel día hacía demasiado calor. Teníamos que recoger a un vecino de origen alemán que se había suicidado en su casa con una pistola. De primeras, el edificio era antiguo y no tenía ascensor (gracias a dios que era un tercero) De segundas, pesaba unos 110 kilos. De postre, llevaba 2 semanas muerto. ¿Habéis olido alguna vez un cuerpo en descomposición? Terrible, espantoso, justo.
Fueron los tres pisos más largos de mi vida. Sudaba como un cerdo, vomité en la escalera, casi se nos cae el muerto (ya contaré una historia parecida con otra señora obesa) Una película, vamos.
Supongo que la moraleja de la historia es que conviene adelgazar por muchas razones ¿pero a que no conocías esta?
P.D 1: seguiré contando historias reales con regularidad, que sé que gustan mucho.
P.D 2: sí, el de la foto del perfil soy yo.
2 comentarios:
jejeje... sería gracioso que hicieras un anuncio en Teletienda vendiendo alguna maquinita de esas de adelgazar aludiendo como ventajas lo mucho que te lo agradecerán los del tanatorio. La solidaridad no tiene limites.
Saludos
¿qué foto?
Sí,es verdad después de la parrilla de George Foreman. Pondríamos al muerto en una de estas y a ver como como cae el caldillo.
La foto es la del perfil. También la he puesto en la entrada de feliz navidad. Si no te sale pónmelo aquí para ver que pasa. Saludos gen.
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